miércoles, 27 de octubre de 2010

La cuestión no es aceptar un mundo ya hecho sino reconstruirlo a nuestra medida.

Queridos pequeñajos,os escribo la carta que me hubiera gustado encontrar cuando aprendí a leer.
Aún os queda mucho camino por delante pero ya veréis como el tiempo pasa volando.

El día que menos os lo esperéis estaréis madrugando para no llegar tarde vuestro primer día de instituto,y así transcurrirán los días,semana tras semana,mes a mes,año tras año.

Aprenderéis que las rimas facilonas de antes son inútiles contra los insultos y la humillación pública.
Que una persona muere cada tres segundos,que el hambre,las enfermedades y las guerras son problemas que no acaban nunca.
Que las calles son peligrosas y oscuras y que sus paredes están pintadas del color de la pobreza.
Que de los cinco sentidos,el que menos usaréis será el tacto,porque en el mundo en el que viviréis la gente es distante y desconfiada.
Que la amistad verdadera es difícil de encontrar,asique tendréis que absteneros de volver a contar un secreto al oído a otra persona.
Que la vergüenza de llamar "mamá" a la profesora en clase no es comparable con la que sentiréis cuando inventen mentiras sobre vosotros y no sepáis como pararlas.
Que las siestas,los cromos y el escondite no duran para siempre.
Que las cosas que solucionabais de forma tan fácil son imposibles de solucionar.
Que el único superpoder que existe es el dinero.

Nos faltan las sonrisas,la plastilina,la pintura de dedos,la fe,la curiosidad,la capacidad de sorpresa,la alegría,el poder ver más allá de los prejuicios,la sinceridad,el compañerismo y otras pequeñas cosas que sólo vosotros sabéis hacer.
Si alguna vez perdéis algo de lo que tanto echamos de menos,deshaced vuestros pasos y buscadlo hasta que lo volváis a encontrar.

Asique disfrutad de las golosinas sin preocuparos por vuestro peso.
Mancharos,mezclaros con el polvo y con el barro,corred entre las hojas de los árboles o revolcaros en la hierba.
No os dejéis llevar por las dictaduras de la mayoría,sed vosotros mismos siempre.
Salid a la calle y relacionaros con el mundo.
Vivid el presente con intensidad.
Y nunca,nunca perdáis la inocencia,pequeñajos.
Puede que nunca vayáis a ser las princesas y los astronautas que pensáis ser,pero en vuestras manos reside el poder de cambiar el mundo.


PD: La última cosa que debéis saber esque los besos en la boca no son tan asquerosos como os los esperáis,saben a caramelo.Lo demás que no está escrito,las cosas realmente buenas del mundo desde el cual os envío esta carta,debéis descubrirlas por vosotros mismos.

4 comentarios:

  1. Jo Matt...que cierto,que monoso,como me ha gustado :D
    es tan cierto...

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  2. Me encanta, es totalmente cierto, todo tal y como lo describes.
    Un saludo!
    Muaaak

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  3. Hola!

    No he comentado hasta ahora porque tenía muchas entradas atrasadas en tu blog y me las he leído todas poco a poco, porque apenas tengo tiempo!

    Decirte que me encanta totalmente como escribes, tienes una gran imaginacion y loe scribes muy bien todo, algo incapaz para otros (grupo en el que me incluyo xD)

    Y esta entrada creo que es la que más me ha gustado, cuanta razóon tienes aquí...

    Besos! =)

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  4. aaaay que duro fue caerse de la infancia, y encontrarse de golpe con la cruda realidad :(

    Que bonito post :) !!

    Un abrazooo!!

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